Caos azul 2023/11/18 | Excélsior
Anselmi será el técnico, es una gran apuesta de la directiva.
No aprenden, no entienden que no entienden. Se llama Cruz Azul y es un barco a la deriva. No sé cómo se van a levantar algún día.
Ahora, el tema es Iván Alonso y un técnico que no conoce el futbol mexicano. Un director deportivo que salió por la puerta de atrás en Pachuca y un entrenador que apenas comienza su carrera.
El señor Velázquez, máxima autoridad de la cooperativa, ya no sabe ni qué inventar con tal de salir de la profunda crisis en la que se encuentran. Pactando trabajar con promotores que le prometen sacar adelante el proyecto y que cada día lo hunden más.
El Deportivo Cruz Azul es un histórico del futbol mexicano que no merece ser tan golpeado. Del equipo campeón ya no queda nada. En ese entonces tenían a Álvaro Dávila como presidente, y con su grupo de trabajo y Juan Reynoso sacaron todo al frente.
Hoy el equipo está perdido, tuvieron una pésima campaña y mira que invirtieron muchos millones de dólares en contratar colombianos, brasileños y jugadores atractivos del mercado nacional.
Ahora quieren un portero y cambiar todas las zonas del campo, lo cual parece casi imposible de lograr. Hay dinero, pero no para seguir tirándolo a la basura.
Hay tiempo para analizar el porqué de tantos fracasos, pero la realidad es que tendrían que empezar a trabajar desde ya para el 2024. En la Máquina ya no pueden perder más el tiempo.
Anselmi será el técnico. Ganó la sudamericana con Independiente del Valle y es una gran apuesta de la directiva. Igual algún día llegó un joven de apellido Larcamón y las cosas funcionaron. El problema es que en Cruz Azul ya no se pueden volver a equivocar.
Lo primero que tendrían que hacer es refundar el organigrama y empezar de cero. Todos los que toman decisiones se tienen que ir, incluyendo al querido Conejo Pérez, que fue utilizado de la manera más baja que se podía.
Óscar es un histórico del club y lo trataron como a un cualquiera.
Cruz Azul verá la liguilla por televisión. Fracasaron con Ferretti, con Moreno, con Aguirre. Un desastre. También lo hicieron con Raúl Gutiérrez.
Y de los jugadores ni qué decir. Parece que les da lo mismo ganar que perder. Cero amor por la camiseta.
Caos azul. Ésa es la realidad de los celestes. Sin presente y con un futuro muy negro a la vista.
Una pena por sus aficionados.
Es el caos azul.
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