La resurrección del Cruz Azul. Por fin y… ¡qué bueno!


Ciudad de México / 04.02.2024 06:24:00

Y pensar que a los cementeros del Cruz Azul les había asestado, este escribidor, una de esas descalificaciones que tan impune y descuidadamente sueltan los opinadores de cosas deportivas.

Pues miren, me retracto con la culpable humildad de quien emite juicios desde la comodidad del teclado de una laptop y, qué caray, aventuro, con la misma irresponsabilidad, que la Máquina, así como se están viendo las cosas, va a ser seguramente uno de los protagonistas del actual torneo Clausura.

En lo que toca a Martín Anselmi, un tipazo el hombre. Antes que nada, se ha ganado, según dicen, la confianza y hasta un incipiente cariño de sus jugadores pero lo que ha logrado, sobre todo, es implantar un sistema y una forma de juego en un tiempo récord. Y esto, con una plantilla que no funcionaba y que parecía no tener ya remedio alguno. Para mayores señas, el equipo terminó en la posición 16, con 17 puntos, en la fase regular de la pasada competición, apenas por encima del Atlas y del sufrido Necaxa (otro club, este último, que ha revivido, miren ustedes).

La sencillez y la ecuanimidad del director técnico de los cementeros son ejemplares siendo que muchos de sus colegas pecan de anticipados triunfalismos y de posturas no sólo soberbias sino hasta majaderas. Los tres triunfos al hilo que ha alcanzado con sus pupilos testimonian, justamente, de su capacidad para motivarlos y ahí tenemos a Nacho Rivero, incansable y tenaz hasta los límites en el último partido a pesar del desgaste de haber jugado tres fechas en el espacio de una semana.

Curiosamente, esta resurrección del Cruz Azul –uno de los grandes clubes del futbol nacional, no lo olvidemos y, precisamente por ello, obligado a rendirle honores a su pasado cosechando triunfos en el presente— coincide con el episodio protagonizado por Iván Alonso, su director deportivo, frente a Miguel ‘Piojo Herrera. Le costó, al cruzazulino, un castigo de un mes entero propinado por doña Comisión Disciplinaria de la Femexfut durante el cual no podrá profanar con la planta de sus pies las canchas, ni estar en el área médica, ni en los vestidores, ni con la prensa, ni nada. O sea, que no exista. De una vez que se vaya de vacaciones a Uruguay y que a su regreso, ya bien sopesadas las cosas en su cabeza, que no responda a las provocaciones de sujetos no enteramente elegantes del pelaje del mentado ‘Piojo’. Al director técnico de los Xolos de Tijuana, por cierto, no le tocó más que una multa cuyos montos desconoce quien garrapatea estas líneas pero que no se compara a la severidad del castigo que le atizaron al antiguo jugador del Deportivo Alavés y del River Plate.

En fin, Cruz Azul es ahora otro equipo. Y, esta es una muy buena noticia para el futbol que se juega en la Liga MX. Muy buena.



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